Día 6
Lectura: Salmo 139:13-18
13 Tú fuiste quien formó todo mi cuerpo; tú me formaste en el vientre de mi madre.
14 Te agradezco porque me hiciste de una manera maravillosa; sé muy bien que tus obras son maravillosas.
15 Tú sabes todo de mí. Tú viste mis huesos crecer mientras mi cuerpo se formaba en el vientre de mi madre.
16 Tú viste formarse cada parte de mi cuerpo; todo ya estaba escrito en tu libro; y
fueron formadas a su debido tiempo, sin faltar una sola de ellas.
17 ¡Qué preciosos son tus pensamientos acerca de mí,oh Dios! ¡No se pueden enumerar!
18¡Pero más difícil todavía me sería tratar de contarlos!¡Serían más que la arena del mar! ¡Y aun si pudiera contarlos, me dormiría, y al despertar, todavía estarías conmigo!
¿Me contas?
¡Me vienen tantas preguntas a la mente! Pero no te asustes voy a hacer poquitas solo para que pensemos juntos.
¿Sabes cuantos huesos tiene nuestro cuerpo?
¿Cómo logra sostenerse nuestro cuerpo si nuestro esqueleto pesa muy poco en relación a nuestro peso?
¿Y cuantos son los cabellos que hay solo en nuestra cabeza?
¿Por qué tu pelo es con rulos o lacio o por qué es de color negro, marrón, rubio o pelirrojo?
¿Y tu piel? Mirá tu mano, observa tus dedos. ¿Podes ver esas líneas que forman una especie de espiral? Son las huellas dactilares. No hay dos iguales en todo el mundo.
Te cuento
Según lo que investigué nuestro cuerpo tiene 206 huesos, pero cuando somos bebes tenemos algunos mas. Y de nuestro cabellos, tenemos millones y millones de esos “hilitos” en nuestra cabeza. Y sobre el color del pelo, hoy se sabe que hay mas de 50 tonalidades en cuanto al color. Y los datos sobre cómo es nuestro cuerpo puede seguir, y no quiero aburrirte. Lo cierto es que Dios estuvo presente en cada detalle cuando tu cuerpo y el mío iban tomando la forma dentro de la panza de nuestra mamá. Ya lo dice su Palabra:
Tú viste mis huesos crecer mientras mi cuerpo se formaba en el vientre de mi madre. Tú viste formarse cada parte de mi cuerpo; todo ya estaba escrito en tu libro; y fueron formadas a su debido tiempo, sin faltar una sola de ellas.
Es así, no tengo dudas. Dios me conoce y te conoce muy bien. No solo la parte física, sino también todo lo que siente nuestro corazón y todo lo que sentimos en nuestro cuerpo. Cómo afirma su Palabra: tu sabes todo de mi… Te aseguro que no hay persona que conozca mas de nosotros que Dios, pues él no hizo.
Casi puedo escuchar tu pregunta. Porque muchos chicos y chicas me la hicieron igual que cada uno de mis hijos: ¿Dios me conoce mas que mi mamá o mi papa? Si. Es así. Él te conoce más que ellos. Él te conoce mas que yo tuve que decirle a mis hijos cuando eran muy pequeñitos. ¿Y por qué estoy tan segura’? Porque su Palabra lo dice: ¡Qué preciosos son tus pensamientos acerca de mí, oh Dios. ¡No se pueden enumerar!
Creo que los pensamientos de Dios es todo lo que Dios sabe de nosotros. Y esos pensamientos son tantos que no sería posible ponerlos en una lista. su Palabra sigue diciendo que podríamos dormirnos pensando en cuánto nos conoce Dios, pero se despertaría y aún podríamos seguir pensando en eso. Realmente es maravilloso. No hay nadie que te conozca mas que Dios. No hay nadie que te ame mas que Dios...
¿Y si hablamos con Dios?
Querido Dios, gracias por ser la persona que mas me conoce en todo el mundo. Gracias por tu gran amor…
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