Lectura especial para la noche...
Día 7
Lectura: Números 6:22-26
El SEÑOR le dijo a Moisés:«Diles a Aarón y a sus hijos que bendigan a los israelitas diciéndoles esto: Que el SEÑOR te bendiga y te proteja; que el SEÑOR sea bueno contigo y te tenga compasión. Que el SEÑOR te mire con amor y te haga vivir en paz. De esa forma Aarón y sus hijos pronunciarán mi nombre ante los israelitas y yo los bendeciré».
¿Me contas?
¿Sabes qué quiere decir bendición o bendecir? Vamos a ver si podemos descubrirlo juntos.
¿Qué dirías de una persona que cada vez que te ve; te saluda con una sonrisa y hasta te da un beso y un lindo abrazo?
¿Qué pensarías si otra persona cada vez que te ve, te comparte algo rico que pueda estar comiendo?
¿Qué pensarías de una persona que sin ser alguien de tu familia, cuida de vos y te ayuda con tus tareas, y hasta te comparte sus cosas materiales?
Claro! Pensarías cosas buenas de esa persona, y no solo las pensarías, sino que también se las expresarías con tus palabras y hasta con gestos de cariño.
Bendición es eso; es expresar, es decir con palabras cosas buenas de una persona o de Dios. A su vez Dios también dice y piensa cosas hermosas de nosotros.
Te cuento
Presta mucha atención. Hubo un tiempo en que el pueblo de Dios tuvo que vivir en el desierto. Eran muchísimas familias, miles y miles de personas, ancianos, adultos, jóvenes y también niños. Sí, niños y niñas como vos. Había momentos en los que todos se cansaban, y hasta se enojaban unos con otros y a veces parecía que se enojaban con Dios. No obstante Él nunca los abandonaba. Una vez después que todo el pueblo fue contado y agrupado con su familia, Dios llamó a su servidor Moisés y le dijo que le dijera al pueblo estas palabras:
Que el SEÑOR te bendiga y te proteja;
Que el SEÑOR sea bueno contigo y te tenga compasión.
Que el SEÑOR te mire con amor y te haga vivir en paz.
De esa forma Aarón y sus hijos pronunciarán mi nombre ante los israelitas y yo los bendeciré».
¿Y sabes una cosa? Esa bendición, esas hermosas palabras y pensamientos Dios también las dice para nosotros hoy y por supuesto para todos niños y las niñas en todas partes del mundo.
¡Qué hermoso es saber que Dios dice cosas lindas de mi, que me protege; es decir me cuida, y que es bueno conmigo y que me mira con amor!
¿Y si hablamos con Dios?
Querido Dios, gracias por tu amor y por pensar cosas buenas para mí, gracias por tu cuidado y protección por mí y por todos los niños y las niñas que conozco.
